¿Quién es el candidato ideal para la cirugía de párpados?
El candidato ideal es un hombre con buena salud física que quiere conseguir mejorar su expresión y estética facial y combatir los efectos visibles del envejecimiento al corregir el aspecto de sus párpados caídos y la hinchazón debajo de los ojos. Pueden no ser aptos, los candidatos que sufren trastornos como enfermedades cardiovasculares, diabetes, enfermedad de la tiroides o producción insuficiente de lágrimas.
Se recomienda que el candidato se someta a una exploración ocular por un oftalmólogo antes y después de la intervención porque existen enfermedades oculares de los párpados como ojo seco, blefaritis, laxitud palpebral…que pueden agravarse al realizar esta cirugía o determinar que el resultado no sea el esperado.
Otro tipo de candidato a la blefaroplastia es aquel preocupado por corregir su deterioro de la visión causado por los pliegues caídos en los párpados superiores.
No existe una edad estipulada para este tipo de intervención ya que la aparición de bolsas debajo de los ojos puede darse en edades tempranas, por tendencia familiar a tener bolsas, como avanzadas. Aunque habitualmente, los pacientes de una blefaroplastia tienen más de 35 años.
La cirugía de párpados, ¿en qué consiste?
La cirugía de párpados es una cirugía ambulatoria, rápida que se realiza con anestesia local y sedación, aunque se puede optar por la anestesia general dependiendo del caso. Suele tener una duración de entre 40 minutos y 2 horas dependiendo de si es la parte superior, inferior o de las dos. Y no es necesario más que permanecer en la clínica unas horas tras la intervención.
En la blefaroplastia superior se realiza una pequeña incisión, siguiendo el surco natural del párpado, para extraer el exceso de piel y restaurar la tensión normal del músculo. Si lo requiere también se eliminan las bolsas de grasa que provocan la caída de los párpados superiores.
En cuanto a la blefaroplastia inferior correspondiente a los párpados inferiores, si existe un exceso de piel, también se realiza una incisión externa siguiendo las líneas naturales, justo por debajo de las pestañas.
Para la eliminación de las bolsas de grasa en los párpados inferiores, se puede realizar por vía externa, mediante un pequeño corte bajo las pestañas y se cierra mediante una sutura muy fina que sirve para tensar la piel. También puede llevarse a cabo por vía interna conocida como transconjuntival, a través de una incisión interna a través de la conjuntiva sin cicatriz quirúrgica por la cual se extrae la grasa. No es necesaria sutura ya que este tejido cicatriza por sí sólo. Este procedimiento es el más común para personas jóvenes de 45 años que no necesitan que se extraiga la piel. Los ojos son protegidos con lentes de contacto protectoras, tras aplicar unas gotas anestésicas.
En caso de que el candidato requiera cirugía en los cuatro párpados, se inicia la intervención por la parte superior. Normalmente se hacen las incisiones en las líneas naturales de los párpados superiores y justo debajo de las pestañas en los inferiores, así se consigue que las cicatrices sean mínimas e imperceptibles. En ambos casos, la piel de la zona circundante a los ojos queda protegida con unos apósitos estériles durante todo el proceso.