En muchas ocasiones cuando una mujer se propone una operación mamaria, una de las cuestiones que pueden preocuparle es ¿mi cirugía de pecho puede afectar la lactancia natural en el futuro? ¿Podré amamantar si llevo prótesis de pecho? Es una preocupación válida y merece una atención cuidadosa para tomar la mujer pueda tomar una decisión informada. En este post queremos ir paso a paso y explicarte cómo puede afectar cada cirugía de pecho a la capacidad de la mujer para amamantar.
Operaciones de pecho y lactancia natural: ¿cómo afecta?
Las operaciones de pecho, dependiendo del tipo y técnica empleada, pueden tener diversos impactos en la lactancia natural. Es fundamental entender que la posibilidad de amamantar tras una cirugía mamaria depende en gran medida de la técnica utilizada, la ubicación de las incisiones y cómo se maneja el tejido mamario durante el procedimiento.
Pero también debemos tener en cuenta que la capacidad de una mujer para amamantar de manera natural también depende de otros factores, tanto internos (hipogalactia como consecuencia de enfermedades o patologías maternas), como externos (estrés, cansancio, falta de apoyo emocional, dieta poco equilibrada… o simplemente el miedo a no tener suficiente leche)
¿Son compatibles las cirugías de pecho con la lactancia?
Aumento de pecho con prótesis
El aumento de pecho con prótesis, también conocido como mamoplastia de aumento, implica la inserción de implantes para aumentar el tamaño y mejorar la forma de los senos. La colocación de los implantes puede ser detrás del tejido mamario o del músculo pectoral.
Generalmente, este tipo de cirugía tiene menos probabilidades de interferir con la lactancia natural si los implantes se colocan detrás del músculo pectoral y las incisiones se realizan en lugares que no afectan los conductos lactíferos, como la vía axilar o el pliegue inframamario.
Mamoplastia de aumento con grasa
La mamoplastia de aumento con grasa, también conocida como transferencia de grasa o lipofilling mamario, implica la extracción de grasa de otra parte del cuerpo y su inyección en los senos para aumentar su tamaño.
Este procedimiento es menos invasivo en términos de intervención directa en el tejido mamario y, por lo tanto, generalmente tiene un impacto mínimo en la lactancia natural. La grasa inyectada no interfiere con los conductos lactíferos o las glándulas mamarias por lo que no tiene por qué afectar a la producción de leche materna.
Cirugía de pecho en mamas tuberosas
La cirugía de pecho en mamas tuberosas o caprinas, aunque su nombre pueda confundir, se refiere a procedimientos que corrigen la forma alargada y estrecha de los senos que tienen una forma de tubo en lugar de ser redondeados.
La corrección de mamas caprinas puede variar en cuanto a la técnica empleada. Si la cirugía implica remodelación significativa del tejido glandular, puede afectar la capacidad de lactar. No obstante, si la técnica es menos invasiva y no compromete los conductos lactíferos, la lactancia puede ser posible.
Reducción de pecho
La reducción de pecho, o mamoplastia de reducción, implica la eliminación de tejido mamario, grasa y piel para reducir el tamaño de los senos. En ocasiones, la cirugía también puede combinarse con transferencia de grasa o con implantes mamarios.
Este tipo de cirugía puede tener un impacto significativo en la lactancia, ya que la reducción del tamaño puede implicar la eliminación de una cantidad considerable de tejido glandular y conductos lactíferos. Sin embargo, algunas mujeres aún pueden amamantar con éxito después de la cirugía, especialmente si se preservan las conexiones entre los pezones y el tejido glandular.
Mastopexia o lifting de mamas
La mastopexia, lifting o elevación de pecho, es un procedimiento destinado a levantar y remodelar los senos caídos. Puede requerir también de prótesis mamarias cuando, además de caídos, los pechos están vacíos, por lo que, al devolverlos a su posición natural serían o muy pequeños, o con una forma poco estética.
La mastopexia es una de las cirugías de mama que más puede afectar la lactancia dependiendo de cómo se reposicionan los pezones y el tejido mamario. Si los conductos lactíferos y las conexiones nerviosas se mantienen intactos, la lactancia puede ser posible. Sin embargo, siempre existe un riesgo asociado de interferencia con los conductos lactíferos. Es por ello, que muchos cirujanos plásticos recomiendan someterse a esta cirugía una vez la mujer haya decidido no tener más hijos ni lactar más.
Se puede lactar después de una cirugía mamaria
La compatibilidad de la cirugía mamaria con la lactancia materna depende de varios factores, incluyendo el tipo de cirugía, la técnica utilizada y la anatomía individual de la mujer. Es crucial que, si deseas someterte a una cirugía de pecho y amamantar en un futuro, plantees todas tus dudas y preocupaciones a tu cirujano plástico. Así como acudir a un especialista experimentado que te pueda proporcionar información específica y ayudar a tomar una decisión informada.